Como todos los años, al llegar diciembre aparecen los mercados de Navidad por toda Europa. Este año es un poco diferente por la pandemia. Bulgaria decidió mantener la tradición dado que no hay grandes restricciones.
Debido a la pandemia de este año, hay algunas diferencias y restricciones en el Mercado de Navidad:
- las mascarillas son obligatorias, incluso aunque en Bulgaria no sean obligatorias al aire libre
- la capacidad del lugar es limitada y controlada mediante una única entrada y salida. Si está a tope, no se puede entrar hasta que otras personas salgan.
- hay un único sentido de circulación. Para volver al mismo punto, hay dar toda la vuelta
- no se puede comer dentro del mercado navideño. Si compras comida y quieres comer, debes irte. De lo contrario estarías incumpliendo la primera restricción al quitarte la mascarilla para comer.
Pase a estas restricciones, el mercado de navidad de este año es incluso más grande que el anterior.
El mercado de Sofia es bastante pequeño comparado con mercados en otros países, donde pueden abarcar todo un parque o la plaza central de la ciudad. Aquí, con la nueva ampliación, solo tiene unos 70 metros aprox.
Había un poco de fila para entrar debido a la restricciones, pero no estuve parado más de 5 minutos que ya pude entrar.
Este año hay una nueva atracción: una figura humana con pantallas. En la foto está difícil de ver la figura humana, y en la vida real también. Al menos cuando las pantallas pierden las líneas internas del cuerpo humano. Gracias a Mamá en Bulgaria que me leyó y me pasó el dato. =)
Una vez adentro se puede ver que hay mucho espacio para caminar manteniendo las distancias. Pero esto es solo la entrada, más adentro hay más gente.
Hay mucha comida y bebidas, donde no falta el vino caliente, y también hay tiendas de decoración.
Como todos los años, hay un escenario donde los fines de semana hay espectáculos para niños. Y frente a él está el gran árbol de navidad de la foto principal de este post. Este año con la pandemia quedó en el medio del círculo formado para que haya un solo sentido de circulación.
En general, el mercado es visitado por mucha gente. Debido a las restricciones de capacidad, hasta resulta más fácil caminar y se disfruta más (con la excepción de no poder comer adentro). Pero por momentos parece que queda vacío, como en la foto de abajo.
Más precios:
Este año, y como desde hace 2 años, también hay churros. O "shurros", ya que todos los carteles están en alemán (como los mercados originales de Alemania). Los venden con y sin chocolate.
La verdad que no me gustaron mucho. Quizás los disfrutaría más si los vendieran rellenos de dulce de leche, como se hace en Argentina. Pero ustedes prueben igual.
Por supuesto, tampoco faltaron los carteles indicando las restricciones:
Y cierro mostrando que cumplí con todas las restricciones, llevando mascarilla y caminando por los espacios habilitados. Quedó un reflejo sobre la mascarilla que parece que estuviera sucio, pero es solo un reflejo.
Los leo en los comentarios
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